Años antes de que la sustentabilidad se convirtiera en una preocupación mundial, los habitantes de Juan Fernández la hicieron un estilo de vida. Hace más de un siglo se autoimpusieron medidas de manejo para la pesca, y han sido pioneros en la creación de grandes áreas de conservación, tanto en tierra como en mar.
Declarado Reserva Mundial de la Biósfera por UNESCO en 1977, el Archipiélago Juan Fernández destaca por su naturaleza indómita y alto nivel de endemismo tanto en tierra como en mar. La naturaleza es la protagonista absoluta y todas las actividades giran en torno a la enorme riqueza ecológica del lugar.